Contaminación acústica

Es el exceso de ruido que se genera en un entorno urbano: tráfico, industria, construcción, servicios… Es algo molesto e irritante, sin duda, pero también nos puede provocar otros daños físicos y psicológicos.

Es una de las mayores preocupaciones en las zonas urbanas: cómo hacer frente a la contaminación acústica. En los últimos años ha crecido de manera desproporcionada en nuestro país y millones de personas se ven obligados a soportar niveles que superan lo55 decibelios (dB), el límite aceptado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) durante el día.

Debemos tener en cuenta que el sonido a los 75 dB resulta dañino, a las 120 doloroso y puede darse riesgo de sordera, y llegados a los 180 dB puedo incluso provocar la muerte.

Entre las ciudades más ruidosas del mundo se encuentran El Cairo, Nueva Delhi, Estambul y París, pero en cualquier momento y en cualquier lugar nos podemos ver afectados por la contaminación acústica.

Entre las características del ruido, se trata del contaminante más barato de producir y necesita muy poca energía para ser emitido. Además es difícil de medir y de cuantificar.

El hecho de que el ruido sólo se perciba a través de un sentido, el del oído, hace que en ocasiones se subestime sus efectos perjudiciales, pero no debemos perderlos de vista.

Según Ecologistas en Acción (http://www.ecologistasenaccion.org/article5350.html), entre sus posibles efectos, están:
– Malestar
– Estrés
– Trastornos del sueño
– Pérdida de atención
– Problemas auditivos
– Baja productividad
– Conductas agresivas

En los casos más graves, se pueden dar mayores índices de ataques cardíacos, así como aceleración en el desarrollo de procesos cancerosos cuando los decibelios sobrepasan de 110.

Niños y ancianos son la población más sensible a los ruidos.

Ciudades como Madrid ya han probado técnicas para reducir el flujo de tráfico y así reducir los niveles de contaminación, y cada vez es mayor la apuesta por los coches eléctricos, que no contaminan ni generan ruido.

La OMS está fuertemente sensibilizada con este tema. En esta guía da una serie de consejos muy útiles para no sufrir la temida contaminación acústica: http://www.who.int/pbd/deafness/activities/1706_PBD_leaftlet_A4_Spanish_lowres_for_web170215.pdf?ua=1